Resulta que si tenés un emprendimiento, “tenés” que estar en Instagram. Así que dije “ok, voy a volver a poner fotos en mi Instagram para que las personas sepan en qué estoy”.
En cuanto volví, comencé a recibir propuestas para tener más seguidores, hacer más publicidad, capacitarme y “posicionarme mejor” en “el algoritmo”
Si hacés una búsqueda muy cortita podés encontrarte una definición:
“Algoritmo: en términos de programación un algoritmo es una secuencia de pasos lógicos que permiten solucionar un problema”
Sir Google dijo
Primer descubrimiento: El “Algoritmo” de Instagram intenta solucionar un problema que tiene Instagram, no yo.
También me llegaron otros gurús del Algoritmo explicándome que “tengo que” crear reels haciendo cosas que hacen otras personas que tienen muchos seguidores; “reels de tendencias” les dicen…
¿Y la originalidad?, bien gracias.
¿Y si se pone de tendencia ponerse un balde en la cabeza hay que hacerlo?
Ah!, sí, cierto que ya se hizo.
Y la cosa no termina ahí, porque me dijeron que tengo que organizar mi semana para un día publicar reels, otro historias, otro un post, otro tutoriales (tutoriales de cosas que ya otros hayan hecho, obviamente). También, tengo que recordar que los temas de mis publicaciones tienen que variar entre las tendencias, mis productos y mi cara (porque a Instagram le gusta mucho en este momento mi cara) ¿y si mañana le gustan mucho las nalgas?…
Y entonces yo me preguntaba: ¿realmente le interesa a Instagram que los creadores creen?
Porque el día tiene 24 horas y todo ese tiempo que te roba Instagram, es tiempo que no estás creando, digo, por decir algo…
Entonces, Instagram que fue una red social, está convertida en un sistema donde pagás por publicidad o hacés lo que te pide el algoritmo que hagas; con la utópica idea de que te verá más gente.
Como el burro que tiene la zanahoria colgando adelante y que nunca alcanzará pero seguir, seguir, seguir…
Y yo me pregunto ¿Qué pasaría si los emprendedores dejan de hacer lo que el algoritmo les dice que deben hacer y se dedican a crear?
¿No nos dimos cuenta ya que la persona que está destinada a tener tu arte te encuentra sin necesidad de campañas publicitarias, ni tareas rebuscadas?
Para mi, es simple: todo es vibración; es energía, es lo que debe ser y como debe ser. Todo es perfecto. Todo es.
Y está perfecto que emprendedores se capaciten para hacer lo que les pide el algoritmo, también está perfecto que hagan lo que les dice, también está perfecto pagar por publicidad y hacer reels de tendencias y tener millones de seguidores y ser millonario. Está genial; los admiro.
Lo mío es más básico, a mi me gusta bordar, pintar, hacer…
Yo no necesito ser la dueña del mundo, ni tener 2 000 000 de seguidores, ni hacer que el algoritmo de Instagram me quiera o me diga que tengo que hacer para solucionar SU problema de “Vender más publicidad”.
En mi Instagram encontrarás las cosas que creo y si te gusta lo que hago genial, podés seguirme para enterarte de lo nuevo por si queres hacer o hacerte un regalito original.
No te esperes que haga el videito señalando cual idiota palabras flotantes; o un reel tutorial del nudo francés de bordado (que ya filmaron más 154 000 veces); porque de verdad, que no puedo subestimar tanto la inteligencia de las personas que me siguen. Esas personas son mi riqueza.
«El que no considera lo que tiene como la riqueza más grande, es desdichado, aunque sea dueño del mundo”